Taller ortográfico completo

Idioma: Español
Asignatura: Lengua Castellana > Ortografía
Curso: Colombia Colombia

El uso de los: "Ahí, hay, ay" y los "porques", se ha convertido en una de las principales dificultades ortográficas de los jóvenes actualmente, a continuación, te presentamos su uso correcto:

"Hay":
Se trata de la forma impersonal del verbo "haber" en tercera persona del singular. Se utiliza para indicar la existencia o presencia de algo o alguien. Por ejemplo:
Hay una mesa en la sala.
¿Hay algún problema?
No hay comida en la nevera.

"Ay":
Esta palabra se utiliza como interjección para expresar sorpresa, dolor, susto o alguna emoción similar. Generalmente se emplea para llamar la atención sobre algo o para indicar que se necesita ayuda. Por ejemplo:
¡Ay, me he lastimado el dedo!
Ay, no puedo creer lo que acabo de ver.
Ay, ayúdame a levantar esto, por favor.

"Ahí":
Se trata de un adverbio de lugar que indica una ubicación cercana o que se señala en el discurso. Indica la situación o posición de algo o alguien en relación a quien habla.

Por ejemplo:
El libro está ahí, sobre la mesa.
Voy a esperarte ahí afuera.
¿Ves ese edificio? Ahí es donde trabajo.

En cuanto al uso del "porque", este se puede emplear de diferentes maneras:

Conjunción causal:
Se utiliza para introducir una causa o motivo que explica una acción, evento o situación.

Por ejemplo:
No pude llegar a tiempo porque el tráfico estaba muy congestionado.
Estoy cansado porque no dormí lo suficiente anoche.

Conjunción explicativa:
Se usa para proporcionar una explicación o justificación de algo que se acaba de mencionar. En este caso, se utiliza con frecuencia después de una coma.

Por ejemplo:
El equipo no pudo ganar el partido, porque los jugadores estaban agotados.
No me gusta el café, porque tiene un sabor amargo.

Sustantivo:
En algunos casos, "porque" puede funcionar como un sustantivo y referirse a una razón o motivo en general.

Por ejemplo:
Quiero saber el porqué de su decisión.
El porqué de su ausencia aún es desconocido.

A continuación, te presento los diferentes casos en los que se utiliza: Por qué

Pregunta directa:
Se utiliza al inicio de una pregunta directa para indagar sobre la causa, motivo o razón de algo.

Por ejemplo:
¿Por qué llegaste tarde?
¿Por qué no viniste a la fiesta?

Pregunta indirecta:
También se utiliza en oraciones subordinadas interrogativas, introducidas por un verbo o un sustantivo que expresa duda, incertidumbre o curiosidad.

Por ejemplo:
No entiendo por qué tomaste esa decisión.
Quiero saber por qué no me llamaste ayer.

Exclamación:
Se emplea para expresar sorpresa, asombro o admiración ante algo que se considera extraordinario o inesperado.

Por ejemplo:
¡Por qué hermoso paisaje!
¡Por qué buen trabajo has hecho!